"A los Cinco"
Cruzo montañas y la veo: cabellos blancos, mirada de duende cansado. Es mi Pacha y se está agotando.
Cuando las rocas se abran a la mitad para recibirla, el Sol que nos entibia la memoria se irá hundiendo en el Océano.
Tendremos que aprender a caminar sin su risa de ojos entornados, sin sus cocimientos de choclo, sin su malhumor pasajero, sin sus pasos inquietos.
Tendremos, digo, y el alma se me agujerea.
Ella se irá. Lo sé.
A mi pesar comienzo a despedirme.
Digo adiós a sus manos desenredando collares con viento, a su cuerpo cansado, a mis ganas de haberla tenido siempre conmigo.
Ella se irá.
Yo me quedaré aún un tiempo más. Y le pondré su nombre a las calles de la memoria, armaré puentes con sus palabras encaminadoras, elevaré ciudades con sus años de recorrer cansancios y una tarde verano le diré a mis vástagos: "hubo una dama, al otro lado de las montañas, que soñó con ustedes."
Ella se irá.
Yo lloraré hasta hacerla recuerdo.
La Hija del Capitán
jueves, 23 de agosto de 2007
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2 Arribos desde el último alunizaje:
conmovedor y fantástico
tequiero!
cris
Gracias Cric!!!
anche io Ti boglio bene!!!
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